8 de Diciembre de 1979
8 de Diciembre de 1979
Texto extraído del discurso dado por el Dr. Celso en la solemnidad de donación de la Central Geral do Diezmo a la Santa Casa de Birigui – SP
Un día, fui al cine. ¡Qué suerte! Vi la película “Hermano Sol, Hermana Luna”. Ustedes deben haber oído hablar. Es la historia de un muchacho llamado Francisco. Francisco.
Este muchacho, un día, resolvió dar un gran ejemplo. Y lo hizo. Era muy rico y comenzó a dar sus bienes a quien lo necesitaba. Se lo conoció como San Francisco de Asís. Y él tiene una frase que para mí, para mí, fue la palabra-patria, la palabra-madre:
“Hubo un día que yo, también, creí en palabras”.
Y, diciendo esto, él se agachó y tomó una piedra, le dio vuelta la espalda al amigo y la llevó para construir un refugio a los necesitados. El amigo, que quería ayudarlo, entendió la lección: “Hubo un día que yo, también, creí en palabras”. Se agachó y comenzó a cargar las piedras.
¿Y usted? ¿Usted solo está hablando hasta hoy o está en condiciones de cargar la piedra?