“Y Paz en la Tierra a los hombres de buena voluntad”.

¿Quiere ver? Porque cuando usted reconozca que es bueno para los negocios; cuando usted reconozca que es bueno para medicina; cuando usted reconozca que es bueno para el comercio; cuando usted reconozca que es bueno para hacer; cuando usted reconozca que es bueno para pensar; cuando usted reconozca que es bueno para idealizar; cuando usted reconozca que es bueno para… resolver; y ahí usted coloca todos los verbos, porque todos los verbos expresan una acción, ¿no es así? Y ahí usted va a percibir que “Paz en la Tierra” cuando los hombres de buena voluntad se reconozcan en su potencialidad y no se restrinjan, sino que se plenifiquen, sin pretender también realizar lo del otro. Ese día, ese día, habrá Paz.

(…)

En otras palabras: el hombre necesita aprender a trabajar en equipo. El hombre necesita terminar con el egoísmo. El hombre necesita entender: si él es bueno en algo, hace aquello. Es donde usted se reconoce a sí mismo. ¡Permanezca en aquello! Plenifique aquello y aquello tendrá una fuerza enorme. ¡No piense si es mayor o menor!