Visiblemente emocionada, la señora Coralia Spilimbergo, del Hogar del Niño de Salto, que habló en nombre de todas las entidades que siguieron la transmisión del evento por medios digitales, resumió: “Todas tenemos un mismo sentido, que es el dar, nuestro objetivo es dar para poder cambiar la realidad de un niño, un joven, un adulto”.

Más adelante, la licenciada Celeste Jerez, en representación de la asociación “Identidad: Programa Minnesota” relataba que trabajan desde hace 25 años con el mensaje de que, a pesar de todo, siempre podemos ponernos de pie y darle la mano a un compañero: “(Con) la expansión del ser humano podemos hacer algo, podemos marcar la diferencia en la vida de muchas personas”.

Por su parte, la directora de la Escuela de Música Nº 2 del Distrito Escolar 18, María de los Ángeles Valladares, se refirió a la responsabilidad que implicaba para ellos esta donación: “Nosotros también tenemos que ser responsables de todo esto que está llegando para transmitir y enseñar esto (…) el dar. Es un acto de amor enorme y a los chicos hay que enseñarles actos de amor”.

“No queremos dejar el ejemplo de la parte material, queremos dejar el ejemplo de cómo se puede ser feliz…”, dijo Ricardo Videla cuando habló en nombre de la CD-PV de Buenos Aires. “Aquel que sienta que es bueno participar tal vez consiga dejar una marca dentro de sí, que lo distinguirá para siempre, porque el alma vive eternas delicias cuando descubre que la fuente de la felicidad está en sí misma, es dar felicidad”.